AÑO
NUEVO, NUEVO SER, MUNDO NUEVO
Por Karen Berg –Directora Espiritual del
Centro de Kabbalah
El año 2013 está sobre
nosotros, y mientras nos paramos en el umbral de este nuevo año que desborda
oportunidades y el potencial para cambios positivos, muchos de nosotros
elaboramos resoluciones para mejorar nuestras vidas.
Sea lo que sea que
queramos transformar, aquí presento unas cuantas recomendaciones que pueden
ayudarnos a navegar los desafíos que inevitablemente encontraremos cuando
establezcamos nuestro camino.
1. Todo lo que está en
nuestras vidas, sea bueno o malo, es una pieza del rompecabezas de nuestra alma
individual. Como explico en mi libro “Continuará: La reencarnación y el propósito
de nuestras vidas”, todo lo que ocurre en nuestras vidas contiene una
lección para nosotros.
Una vez que estamos
conscientes de que está es la situación, podemos y deberíamos entender también
lo siguiente: “Si mi jefe me despide o mi novia termina conmigo, hay algo que
necesito aprender.
Tal vez necesite mejorar la forma en la que hago las cosas,
o quizás la situación en sí me está convirtiendo en una mejor persona. Una cosa
es segura, dicha situación ha venido a ayudarme”.
2. Estamos aquí para
convertirnos en líderes en nuestras propias vidas. Pero ¿qué es el verdadero
liderazgo?
Un líder es alguien que está dispuesto a dominar sus propias
ilusiones, sus juicios sobre otros y las nociones preconcebidas sobre las
situaciones. Un líder no trata de controlar a otros o el ambiente que lo rodea,
más bien intenta controlarse a sí mismo.
Un líder también es alguien
que puede hacer que las cosas ocurran. Simplemente tener la visión no es
suficiente, especialmente en estos días en que vivimos de la forma en lo
hacemos.
De acuerdo a los kabbalistas, vivimos en un mundo de acción y ahora el
mundo necesita acciones positivas, no sólo visiones positivas.
Un líder no es
alguien que mira algo y dice: “Oh Dios, eso está mal”. Más bien, un líder ve
algo y dice: “Ok, ¿Cómo utilizo las herramientas prácticas para cambiar esta
situación para mejor?”.
3. Dios no hace tratos.
Nosotros los humanos los hacemos, y muchos. Decimos: “Oraré tres veces al día o
daré cuatro horas a la semana para salir de mi rutina y entonces ‘x ‘, ‘y’ o
‘z’ ocurrirán”.
Pero cuando x, y o z no ocurren, estamos desconcertados y
preguntamos: “¿Cómo es posible? He hecho todas estas cosas; he hecho todo lo
que prometí”.
Bueno, la razón por la que x, y o z no ocurrieron es porque
estábamos intentando hacer un trato con Dios.
Desafortunadamente el universo no
trabaja de esa manera.
En este mundo, el único
trato que podemos realizar es hacer y ser lo mejor que podamos para alcanzar el
nivel de entendimiento que Dios ha dado a cada uno de nosotros para que
alcancemos, de esta forma, al final despertaremos en la mañana y no sólo
veremos la belleza que está frente a nosotros, sino que también nos
maravillaremos ante cuán increíble es el que podamos ver.
4. Cada mañana necesitamos
tomar una simple decisión: ¿Voy a vivir sólo para mí el día de hoy? o ¿daré de
mi ser y haré el trabajo espiritual para poder recibir las bendiciones que
realmente están destinadas para mí?
La verdad es que podemos crear un mundo
nuevo este año. Podemos lograr esto a través de unir todos nuestros esfuerzos
para despertar y escoger participar en este Juego de la vida, el cual es
trabajar cada día en completar la parte de nosotros que debe finalmente
retornar al Creador.
El mundo no terminó el 21 de
diciembre de 2012, pero tal vez hemos comenzado un capítulo nuevo.
El mundo
reposa en la balanza entre gran positividad y gran negatividad, todos y cada
uno de nosotros somos quienes, a través de nuestras acciones y nuestra
conciencia, decidiremos hacia qué lado se inclinará la balanza.
SIN EXCUSAS
Por
Yehuda Berg - Centro de Kabbalah
Uno
de los grandes regalos de poder viajar alrededor del mundo diseminando esta
sabiduría es que puedo conectar con muchas personas.
Generalmente escucho a
aquellos que asistieron a una charla introductoria y comentan que se sintieron
inspirados y que les gustaría aprender más acerca de la Kabbalah pero no tienen
tiempo.
Incluso
para quienes reciben las Afinaciones, frecuentemente leo que utilizar esta
sabiduría los ayuda en sus vidas, y que gracias a ellas les gustaría tomar
clases o conseguir un maestro y comprometerse realmente con el camino de
cambio, pero están muy ocupados con el trabajo por el momento, tal vez el
siguiente mes.
Por
supuesto, cuando llega el siguiente mes, generalmente están con algo más que
los mantiene ocupados.
Casi
cualquier forma de espiritualidad concuerda con la idea de que el verdadero
propósito de nuestras vidas es fortalecer nuestra conexión con el Creador.
Entonces ¿por qué, incluso aquellos de nosotros que creemos que esto es
verdadero, gastamos tanto de nuestras vidas haciendo cualquier cosa menos lo
que vinimos a hacer en este mundo?
La respuesta yace en
la siguiente historia:
Una
vez existió un rey que estaba muy enfermo. Dijo que cualquiera que pudiera
sanarlo tendría garantizadas dos horas en el tesoro real para que se llevase
todo el oro, los diamantes y rubíes que pudiera recolectar.
No pasó mucho
tiempo antes de que uno de los consejeros del rey lo curara y se le diera
acceso al tesoro. Una vez sanado, el rey estaba preocupado por dar mucho de sus
riquezas.
Así
que ingenió un plan para distraer al consejero. El rey sabía que este consejero
en particular sentía una increíble pasión por la música, así que contrató a
cientos de los mejores músicos para que tocaran las más hermosas melodías
dentro de la cámara del tesoro mientras el consejero reunía su fortuna en esas
dos horas.
Cada
vez que el consejero se acercaba a una de las joyas, aumentaba el volumen de la
música para distraerlo. A veces, un nuevo instrumento se agregaba y él tenía
que tirar todo para ir a ver con entusiasmo.
Al tiempo, se dio cuenta que sus
bolsas estaban vacías y que mejor empezaba a recoger el tesoro, pero era muy
tarde. Su tiempo había terminado.
Nosotros
somos como el consejero: nos distraemos.
Cuando
empezamos a enfocarnos en el verdadero propósito de nuestras vidas, el Oponente,
nuestro lado negativo, siempre desviará nuestra atención.
Una
buena forma de vencer esa voz es no darle espacio para que entre en primer
lugar.
Cuando ocupamos nuestros pensamientos y nuestro horario con nuestro
trabajo espiritual, con compartir, con otros, con conectar con la Luz,
¡entonces no hay espacio para las distracciones!
Vivir
un camino espiritual es difícil cuando tus conexiones vienen y van. La Luz es
constante, y cuando somos constantes en nuestra espiritualidad, atraemos
constantemente la Luz a nuestras vidas.
Siempre
habrá una razón para no estudiar, para no compartir, para no comprometerse,
¡porque así trabaja el Oponente!
Hasta
que un día sea muy tarde para recibir todos los tesoros que la Luz tiene
destinados para nosotros.
Cuando
dejamos de poner excusas y realmente nos comprometemos con el camino de cambio,
comenzamos a vivir el propósito de nuestras vidas.
Todo
lo mejor, Yehuda
NUESTRO SER MAS ELEVADO
Centro de Kabbalah
Ninguno de nosotros es perfecto. Todos
hemos hecho cosas que no deberíamos haber hecho y nuestro karma probablemente
no es el mejor. Todos tenemos al menos un poco de caos viniendo a nosotros de
vez en cuando.
Los Kabbalistas enseñan que cada uno de
nosotros es dos seres. Todos tenemos el ser imperfecto que reacciona, tiene
dudas y hace cosas negativas.
Desafortunadamente, la mayoría de
nosotros somos así la mayor parte del tiempo.
Pero también existe un segundo
ser perfeccionado al cual podemos acceder, uno que está consciente y actúa de
acuerdo a las leyes espirituales del universo, para que éste derrame sobre
nosotros realización y éxito al máximo.
Un sorprendente secreto sobre este
segundo ser es que, debido a que es nuestro ser perfeccionado, nunca ha hecho
ninguna de las cosas negativas que hemos hecho en esta vida o en vidas pasadas.
Nuestro ser perfeccionado nunca ha herido
a nadie, nunca ha perdido una oportunidad y nunca ha tomado una mala decisión.
Mientras más decidamos en nuestro día a día conectarnos con nuestro ser más elevado, más podremos corregir nuestro karma y protegernos del caos.
El simple hecho de saber esto puede
inspirarnos a conectarnos con nuestro ser perfeccionado más y más cada día.
EXACTAMENTE
LO QUE NECESITAS
LO QUE NECESITAS
Centro de Kabbalah
No es fácil recordar que el Creador está siempre
ayudándonos.Especialmente en momentos de dificultad, depresión o aflicción
solemos olvidar que incluso nuestros desafíos provienen del Creador.
Cuando estás perdido en la oscuridad, sin importar cuán
difícil puede parecer, es importante recordar que esto también proviene de la
Luz.
De otro modo, sería como decirle al Creador: “¡No quiero tu
ayuda! Prefiero hacerlo a mi manera”.
Sabe que lo que sea que estés atravesando es exactamente lo
que necesitas atravesar el día de hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario